Pues bien, una vez dicho esto, si sigues a menudo el blog habrás notado ya que las rutas que compartía no se ceñían al articulo. Pues bien, la razón es que mi reloj GPS empezó a funcionar mal desde hace un par de semanas. Durant mis salidas en bicicleta empece a notar que se detenía de golpe, sin motivo aparente. Para cuando me daba cuenta de que estaba parado tenia que volver ha encenderlo y pulsar de nuevo 'start'. Lógicamente, entre el momento en que se paraba y cuando me daba cuenta de ello podían haber pasado ya varios kilómetros.
Lejos de ser un manitas, para que os voy ha engañar, más bien soy un manazas de la 'm' a la 's'. Sin embargo si se me da muy bien buscar por Internet, entorno en que estoy más de 10 horas diarias. No me costo mucho dar con algunos deportistas que usaban el mismo reloj GPS Garmin que yo con idéntico problema. Por alguna razón cuando recibía una vibración se para. Diagnostico; una mala conexión con la batería.
En mi última ruta en bici por el Vallès ya me harte de ir encendiendo el GPS cada vez que cruzaba un pequeño bache, por lo que finalmente me arme de valor y decidí intentar, por mis propios medios, reparar el reloj GPS. ¿Recuerdas que te avise de que no era un manitas? Pues lo dicho, se me rompieron las conexiones que unen la pantalla con la batería, descartando toda posible reparación fácil, rápida que devolviera a al vida mi valioso juguete.
Por ese motivo, me vi tentado a mirar en el mercado que relojes GPS hay. Y en que momento me puse a mirarlos. ¡Qué joyas! Y lo digo de verdad. No solo son excelentes computadoras, que cumplen a la perfección su cometido; registrar tus rutas, mostrar rutas ya grabadas, monitorizar tus ritmos, velocidad, distancia, ritmo cardiaco, etc. No importa donde, mar, agua, bici o a pié. Van a la perfección y sus capacidades son infinitas. Pero es que además estéticamente son muy bonitos. Déjame que sea un poco malo y te lo muestre en imágenes.
Eh aquí los dos relojes GPS Garmin con los que no consigo quitármelos de la cabeza desde hace ya varios días. Y por esa razón quise compartir con vosotros este gran dilema con la esperanza de que me ayudarais a decantar la balanza hacía el lado de uno o del otro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario